martes, 31 de marzo de 2015

¿Monarquía o dictadura? El dictador Franco hizo de España un reino

Al día de hoy lo que debe haber es democracia, dentro de lo posible en una monarquía por constitucional que ésta sea. Y 'España es un país soberano, miembro de la Unión Europea, constituido en Estado social y democrático de derecho y cuya forma de gobierno es la monarquía parlamentaria'. 

No le fue concedida a Mariano Rajoy su mayoría parlamentaria para que faltara en absoluto al programa electoral que presentó. ¡Qué añagaza la suya! Tampoco para que, valiéndose de ello, pueda ganar por votación la implantación de leyes arbitrarias que a sus fines se le antoje imponer, tal como la, denominada por la sociedad, 'ley mordaza', la cual se halla en contraposión con un Estado democrático, con un   Estado de derecho. Birla al ciudadano esta  'Ley de Seguridad ciudadana' un derecho que le concede la vigente Constitución Española, en su  artículo 20, y la Declaración Universal de Derechos Humanos, en el 19. ¡Siempre el incumplimiento de derechos del ciudadano que le concede ambos textos!
                                                                                 

No nos encontramos muy bien, que digamos, está resultando que, como pronosticó Tácito, el poder coseguido por medios culpables, nunca se ajustó con buenos propósitos. Rajoy mimtió al cien por cien para obtenerle, y ahora... Ahora impide protestar.  . 
                                                                       

Ley injusta.
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Una ley es justa no porque sea ley, pero debe ser ley porque es justa. 
                                  - Barón de Montesquieu -

Y he aquí a lo que ascienden lo que determinan como infracción a dicha ley en cuestión, de unánime rechazo y que el PSOE ha llevado al Tribunal Constitucional, son sanciones leoninas. No ciertamente para quien crea este baremo. Me recuerda que en cierta ocasión dijo Rodrigo Rato, con relación a la LAU, que en España había subido tanto la vivienda, porque el español puede pagarlo. Un alquiler modesto en aquel tiempo era de trescientos cincuenta a cuatrocientos euros. Sí, estaba al alcance hasta de un mileurista. Con nula razón hablaba el ministro Rodrido Rato.  Se incumplía, en efecto, el artículo 47  de la Constitución en cuanto a que 'todos los españoles tienen derecho a disfutar de una vivienda digna y adecuada'. Había y continúa habiendo, esto sí, el inconveniente de que el SMI sólo ha llegado a ascender a 21,62 euros/día o 648,60 euros/mes, como bien sabe el citado economista, segundo de a bordo en el gobierno e Aznar.  Por su peculio puede -¡también!- pagar cualquier ciudadano, por modesto que económicamente sea, las siguientes sanciones por lo que es considerado por Rajoy y su gobierno un delito.  Será el delito de amar la libertad individual, la honestidad,  la justicia y, en pos de ello, querer dialogar. Ignora que todo aquello que sofoca la individualidad, sea cual fuere el nombre que se le dé, es despotismo. No está por leer a Stuart Mill. Tampoco a Maquiavelo el cual le advierte de que cuando una cosa es buena por sí no necesita leyes.    
                                                                              
 

 Siempre cabe recurrir la multa, que esto no ha sido eliminado y es asequible en general.
                                                                              

La seguridad ciudadana estribaría en que cada ciudadano tuviera lo imprescindible para subsistir; no se puede vivir desnudo, sin casa y sin comer. Si careces de ello por culpa de corrupción política, y encima no puedes quejarte, se ha de morir sin decir ni pío, ¡ya es castigo, ya es esclavitud! La esclavitud fue abolida, mas a lo que parece no faltan individuos en este pícaro mundo que quieren reimplantarla.¡Y hablan de democracia!
                                
Niega Rajoy, su gobierno, lo que acabamos de leer en esta viñeta, que 'La Sociedad Civil tiene el deber de guiar a su gobierno, hacer sentir su poder y su mandato y fiscalizar su rectitud'. Un papel de primer orden ha de jugar en tal control la Prensa y los Tribunales de Justicia. Por ello ahora los sindicatos de periodistas y los jueces han elevado el grito al cielo ante lo que consideran una ley descabellada. Quiere tan imperfecto presidente gobernar a base de leyes que reduzcan al pueblo español a su somentimiento de abusivo poder y de intereses espurios; ya fue sumamente falso y engañoso para conseguir instalarse en Moncloa, y no al servicio de todos los españoles y en exclusiva de España. 

El bipartidismo que tanto nos ha quitado, nos quiere en el gobierno de Mariano Rajoy desposeer de la libertad,  en definitiva de ser hombres. La libertad -dijo Manuel Azaña- no hace ni más ni menos felices a los hombres; los hace secillamente, hombres. Ahora resulta que se va a tener que 'pagar muy caro' decir la verdad, porque se quebrantará la ley, caso que me lleva a recordar y repetir la afirmación del escritor británico George Orwell, que se adapta a esta situación como anillo al dedo: En tiempos de engaño universal, decir la verdad se convierte en un acto revolucionario. No es turbulento, por ejemplo, que el bipartito hiciera la vista gorda ante la familia patriarcal de Jordi Pujol, hoy día acusado como el mayor corrupto de España, lo que ya extrañaba a Mariano Rubio durante su periodo de Gobernador del Banco de España y cuya viuda, la escritora Carmen Posadas, nos dice: A Mariano le parecía imposible que no le dejaran tocar lo de Banca Catalana. [...]  Mariano sabía que había irregularidades en Banca Catalana pero no interesaba a PSOE ni al PP. No deja de ser algo desordenado someterse ciegamente a la 'troika' -Comisión Europea (CE), Banco Central Europeo (BCE) y Fondo Monetario Internacional (FMI)- pero debe creerse que está por encima del bien y del mal. 

No admite protestas; claro que para conseguirlo totalmente tendrá que promulgar otra ley mordaza que se extienda a todos los partidos políticos. Y, consecuentemente, cerrar las Cortes, aunque ya era para estar acostumbrado a que le pongan verde, que no deja de ser acreedor a que le censuren acremente, en tal recinto y en otros lugares. No ignorará, al menos alguno del gobierno y/o alto cargo del partido  lass críticas del Gran Wyoming y que éste expone: 'Entre PP y Podemos no tengo niguna duda' - 'El PP ha incumplido su programa punto por punto, está deslegitimado' - 'El PP no cumple su programa y miente, Podemos ya lo veremos'. Lo visto hasta aquí en Pablo Iglesias es su credo político inteligente y honesto, entendiendo que la ley superior es el bien del pueblo. (Cicerón). 

Me temo que los españoles, por supuesto también los extranjeros, continuarán comentando, rechazando, hechos como la financiación ilegal del PP durante al menos dieciocho años. Todo lo que gravita sobre esta formación política y sobre Rajoy en peligro, blindado hoy por la mayoría absoluta que alcanzó, pero ¿y mañana? Su legislatura toca a su fin, y tiene todas a su favor para no ser reelegido. Flaco servicio ha hecho a la generalidad de los españoles; dejemosnos de sus faroles y preguntémoslo, por ejemplo, a Caritas. 

Muy bochornosa noticia humeante. 

Cuidado, Presidente, Bárcenas ya no es tan fuerte como le recomendaba en sus SMS de apoyo moral, y no está dispuesto a tragarse el marrón. Hoy puede leer (desde hace mucho tiempo, ya con la casta, los altos políticos se enteran del acontecer político mediante la prensa) que Bárcenas atribuye la responsabilidad de la caja b a Rajoy y a los secretarios generales a lo largo de la existencia de la misma -1990 a 2008-, o sea, Francisco Álvarez Cascos,Javier Arenas y Ángel Acebes, mientras el abogado defensor del extesorero afirma tajante:
Nuestro patrocinado no tiene la condición ni actuó en ningún momento como administrador o responsable legal de la formación política. Los administradores o legales representantes del PP son aquellos en los que el Congreso Nacional del PP otorgó los poderes generales y habilitaciones especiales con carácter indistinto y solidario, con las más amplias competencias para la administración, disposición y representación de los bienes e intereses del partido y para la comparececia con plenas facultades ante todos los organismos de la Administración pública. 
¿Quién ejerce en este amplio sentido la representación del Partido Popular? Pues, de modo evidente, el presidente y su número dos: don Mariano Rajoy Brey y doña María Dolores de Cospedal. Para 'más saber' sobre este tema léase el Recurso de Luís Bárcena (pdf). Por otra parte, a ver cómo se defiende el PPde cuanto el juez Ruz afirma en su auto: que con la caja b 'sufragó campañas electorales, sobresueldos a dirigentes y reformas en las sedes de su partido, incluidas las obras realizadas en su sede central de la calle Génova, 13, Madrid'. Otras acusaciones. 

En fin, Mariano Rajoy quiere que se toque silencio y todos a dormir, y no a modo cuartelero sino mediante ley. Silencio de noche, silencio de día. Una especie de ley de mordaza tuvieron los cartujos -y tiene lo que queda de la orden-, los Trastamara, incluida Isabel I de Castilla, les protegieron generosamente, pero sin querer hacer de España sólo cartujos. El silencio es la norma de su vida, y por lo dado al mismo que es Rajoy pienso que mucho le seduce tal regla a seguir, que él,desde luego, la cumple bastante. Pero allá él con su admiración a la mudez, no puede convertir a España en cartuja,  Monasterio o convento de la Orden de los Cartujos.  

Él confía en su gran respaldo.    

Tanto por la mayoría alcanzada, en base a lo que ha sido una engañifa, como por tener sometido el poder ejecutivo al poder judicial, Rajoy puede permitirse el lujo de que a lo largo de su legislatura se haya aclamado por su dimisión insistentemente y resistir, no obstante, en su puesto de presidente -de jefe del Estado si hubiera República- hasta el final de la misma. Creo con Antonio Gala  que los políticos honrados se quitan de en medio cuando cae sobre ellos la sospecha. Rajoy se hubiera evitado de tener que oír en las Cortes tantas diatribas al efecto. Sostiene también dicho autor que para ser un político respetable se tienen que guardar tres lealtades: a uno mismo, a su tiempo y a su pueblo.  Para llegar a lo sumo de su  incumplimiento ha hecho todo lo contrario de lo prometido. Tanto ha recortado que ahora quiere cortar la lengua al pueblo. 
                                                                                  

No enseñó a los votantes las tijeras que iba a ser su arma de gobierno -¡y teniendo otras mejores!-, ni, por otro lado, ha predicado con el ejemplo, empleando éstas también para él y sus colegas. 
                                                                            


No voy, aquí y ahora, a entrar en detalle -hasta donde fuere posible- de la declaración de su patrimonio y renta, ya es bastante injusto que tenga tres pagas, a las que hay que añadir la dieta de alojamiento y manutención que se le atribuye. 


Horripilante, Dios mío, esta diferencia, y en infinitos casos con parados que están tan cualificados, y más que él. Ya he significado en más de un artículo que en esta crisis sui generis el paro no es solo obrero. Clama al cielo también que cargos políticos-administrativos perciban una paga abusiva mientras ellos mismos quieren que ocupen un puesto similar por un mísero salario los que se colocan hoy. No te da vergüenza -le dijo a uno Pablo Iglesias- que un señor tan preparado como tú, o mejor, reciba infinitamente menos. Se pusieron, con ayuda del carnet o por lo fuera, una paga gigantesca, pero, tratándose de otro, sólo tatándose de otro, entienden lo que de absurda, leonina para el país, tiene. Y, bueno, pues querran compensar: todo lo que yo vengo cobrando de más, que lo cobre de menos el de ahora. 

El silencio que debiera imponer es hablar de la ruptura de la unidad de España; bueno, Mas hace algo más que hablar: está dando pasos tratando de conseguir la independencia de Cataluña. Prepotente contra la sociedad  y pusilámine en el aspecto dicho.   
     

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