lunes, 6 de febrero de 2023

EN TORNO A LA FIGURA DE FRANCISCO FRANCO BAHAMONDE - Sanguinario y de rectitud moral. (Primera parte)

Amar y reconocer los defectos de aquel
a quien se ama; odiar y reconocer las
buenas cualidades de los odiados, son dos
cosas bastantes raras bajo el sol

(Confucio)


Mucho se ha escrito sobre él; por supuesto después de su muerte, pues en vida no cabía ni pensarlo, era tabú. Y su régimen también Un buen retrato hace Juan Eslava Galán con referencia a la picardía con que procedió -pro domo sua, a su beneficio- a la sombra de Italia y Alemania, el inmenso prestigio -escribe- del Duce Führer sirvió para cimentar el prestigio del naciente Caudillo y, ampliando el paralelismo, para justificar sus prerrogativas absolutas, la exaltación de su figura y el culto a su personalidad. He aquí su etopeya y prosopografía  de la que aún hay una inmensa mayoría que conoció de visu: El Caudillo, hombre limitado, inculto, mediocre militar, (sólo buen comandante de batallón) nulo estratega, bajito y de voz atiplada, cuenta, sin embargo, con la astucia necesaria para navegar con paso corto y vista larga. A ello se añade su misterio "baraka" que va eliminando sus problemas. Ésta le acompañó siempre y en todo, en la guerra y en la paz, en lo militar y en lo político.

De todos modos. el venero de su alto destino se halla en su ingreso en la Legión española al fundarla en enero de 1920 el heroico general José Millán Astray, que contó con la colaboración del comandante Franco al que puso como teniente coronel                                                     

Millán Astray y Francisco Franco 

Llegó a ser, digamos, omnipotente, ejerció pleno dominio incluso sobre sus generales con los que ganó la guerra civil. Al salirle todo lo que en castellano en locución adverbial se llama a pedir de boca, mandó a su antojo, subyugó, dueño de España, dictador, durante casi cuarenta años. Como tal, todos los poderes cayeron bajo su mandato: civil, militar, eclesiástico. La Iglesia la mimó, y ésta fue mimada por él, no habiendo sido tan afecto a ella durante su época de vida legionaria, pues no le conocían como frecuentador de la misa y los prostíbulos.

A la salida de San Francisco el Grande, funeral de Alfonso XIII
 

Sus generales no querían que gobernara tras acabar la contienda y hubo, en lo que cabe, oposición. Queipo de Llano al que desterró a Italia, falleció en 1951 y lleno de amargura de que "Paca la Culona" gobernara. No les hizo caso en cuanto abandonar el Gobierno, aunque para captarles lo más posible les puso en  disposición de enriquecerse, amén de incrementar vanidad, así a Juan Yagüe Blanco le asciende a teniente general -1943- y cuando muere en 1952 le concede el marquesado de San Leonardo de Yagüe, a título póstumo. Hizo marqueses a los generales Varela, Kindelán, Dávila, Vigón, Saliquet, y Queipo de Llano . A Moscardó le hizo conde. A Mola, "el Director"del golpe de Estado, muerto en accidente aéreo el junio de 1937,  le nombró duque. Hacía lo que quería de ellos y de este modo no dejaba de demostrárselo. 

Los generales monárquicos querían la restauración de Alfonso XIII y él estaba deseando la terminación de la guerra, victoria de Franco para ser restaurado, mas el Caudillo fue cruel, ya que directamente le desengañó de lo que anhelante esperaba y, por añadidura de una manera cruel, acusándole de cuantos errores había cometido. Luego vendría la lucha entre Franco y D. Juan de Borbón, Príncipe de Asturias, en la que, como es notorio, éste no consiguió reinar. Item más, se reservó la potestad de por vida de elegir rey. Además hacerle 'a su imagen y semejanza'. Aquí sí que falló. Pese a ello, no deja de haber en cierto modo vestigios de franquismo, tantos años, tanta huella. 

Las dos Españas.

Españolito que vienes al mundo te guarde Dios.
Una de las dos Españas ha de helarte el corazón.

(A. Machado)

Franco que tanto abogó por la distinción entre entre las dos Españas, manteniéndolas férreamente mientras vivió, hizo una excepción con su hermano Ramón, el célebre aviador del Plus Ultra y también célebre por ser tan acérrimo republicano que quiso bombardear el Palacio Real. Había sido Ramón Franco expulsado de la escala militar.  No obstante y procediendo como un tránsfuga se presentó en Salamanca y se puso a disposición del cuartel rebelde. Entonces se vuelca con él nombrándole, de súbito, jefe de la base área de Baleares. Ello sentó mal, y no sólo en el ámbito militar; ahora bien, el único que se atreve a protestar es Alfredo Kindelán. Lo efectúa con esta carta a Franco.

La medida, mi general, ha caído mal entre los aviadores, quienes muestran unánime de seo de que su hermano no sirva en aviación, al menos en puestos de mando activos. Los matices son varios: desde los que se conforman con que trabaje en asuntos aéreos fuera de fuera de España, hasta los que solicitan sea fusilado; pero unos y otros tienen el denominador común de rechazar, por ahora, la convivencia alegando que es masón , que ha sido comunista que preparó hace pocos años una matanza, durante la noche, de todos los Jefes y Oficiales de la Base de Sevilla  y sobre todo que, por su semilla, por sus predicaciones de indisciplina, han tenido que ser fusilados jefes, oficiales y clases de Aviación. 

Esta carta la publicó en su libro en su libro "La verdad de mis relaciones con Franco". Planeta . Barcelona 1981. Ni que decir tiene que esta dura comunicación fue para Franco baladí. ¿A qué pudo deberse la transformación política de Ramón Franco? Pudo ser de orden familiar y/o desencanto por el fusilamiento de su compañero aviador, veterano amigo, Julio Ruiz de Alda en la cárcel Modelo. 

Si la frase con que Espronceda acaba su 'Canto a Teresa': 'que haya un cadáver más, ¿qué importa al mundo?, a Franco ni un cadáver ni los que fueran, conforme demostró en la dirección de la batalla del Ebro, cuya estrategia tosca irritaba a sus generales, y en esta Aranda apenas pudo disimular su enfado, fue para él: "una ciega lucha de carneros que se topan con las cabezas hasta que se agote el más débil. El tratar de que se produzca el menor número de bajas a que debe aspirar todo buen militar, es cosa que a Franco no le importaba, y si poco valor tiene para él la vida del soldado y militares de graduación, tampoco le preocupaba la población civil como quedó puesto de relieve con sus bombardeos a Madrid y otras ciudades, así como el ametrallamiento aéreo de masas. Ya no hablemos de sus fusilamientos a lo largo de su dictadura

Pero si a Franco no le importa el número de muertos en la acciones bélicas, ni en fusilamientos -estaba dispuesto a fusilar media España, como no dejó de decir- no le importó el comunismo y la masonería, y siendo un obseso de ambos, lo rechazó referente a su hermano, en él no pudo ser más indulgente con un comunista y masón. No obstante meses antes no haber dudado en ordenar el fusilamiento de su primo el oficial Ricardo de la Puente Bahamonde, aunque delegó su firma de la sentencia de muerte en el general Orgaz. El   destacado aviador, del vuelo del Plus Ultra, llevó a cabo operaciones con los nacionales en el Mediterráneo, muriendo en una de éstas el 28 de octubre de 1938, cayendo en picado al mar el hidroavión cuando se dirigía a bombardear Valencia o Barcelona. A título póstumo fue ascendido a coronel.

Continuaremos versando sobre el contraste del sanguinario, inhumano, cruel, feroz, insensible, atroz, despiadado, carnicero y algún otro más epíteto que me deje, del dictador Francisco Franco en contraste con su ética, rectitud moral, en ciertas facetas de la ética, de la moral. Cristiana y no cristiana.  Para unos hechos absoluta falta de conciencia, mientras para otros gran escrúpulo de conciencia, gran miramiento.           

                                                    

No hay comentarios:

Publicar un comentario